El nuevo sistema de innivación artificial de Alto Campoo, según las estimaciones que baraja el Gobierno de Cantabria a partir de los estudios técnicos realizados, permitirá a la estación de esquí abrir 120 días al año, cuando la media actual es de 75 días (un 40% más), e incrementará en casi 28.000 el número medio de esquiadores que cada temporada registra la instalación, pasando de los 49.912 de la pasada campaña a los 77.633 que se calcula recibir de cara a la 2015/2016.
Asimismo, se prevé la creación de más de 25 empleos directos, a los que hay que añadir otros de carácter indirecto e inducido derivados de las obras de ejecución de esta infraestructura, así como del mayor número de días de apertura y de usuarios. Consecuentemente a todo esto, la facturación de Alto Campoo aumentará cerca de un 80% con respecto a temporadas anteriores y, con ello, también lo hará la trascendencia socioeconómica de la estación en el conjunto de la comarca campurriana, especialmente en el ámbito turístico.
El presidente de Cantabria, Ignacio Diego, acompañado por el consejero de Turismo, Eduardo Arasti, ha anunciado hoy la próxima licitación por parte de Cantur de esta infraestructura, que saldrá a concurso con un presupuesto máximo de 10.753.221,60 euros y que, si las condiciones meteorológicas ayudan al desarrollo de los trabajos, podría entrar en funcionamiento la próxima temporada.
Diego ha destacado la voluntad de su Gobierno de «repotenciar» este recurso turístico tan importante para Campoo y buscar usos alternativos para la estación fuera de la temporada de nieve, objetivos éstos que coinciden, precisamente, con los ejes fundamentales de actuación del Plan Director de Alto Campoo elaborado en 2012.
El presidente ha considerado «imprescindible» implantar este sistema para garantizar la viabilidad económica de la estación de Alto Campoo, reforzar su papel como motor económico de la comarca e incrementar su competitividad, ya que actualmente es la única del entorno que no cuenta con cañones de nieve artificial.
Su instalación significará, además, una menor dependencia de los ingresos de la presencia de nieve natural y, por tanto, una menor incertidumbre en cuanto a la planificación económica, incentivando así la venta de forfaits de larga duración y mejorando la imagen de la estación.
Según ha explicado, la zona a innivar comprenderá una longitud de 7,3 kilómetros (el 27% de la longitud total de la estación, que cuenta con 26,81 kilómetros esquiables) y afectará a las pistas El Chivo II, Pidruecos I y II, Río Híjar I y II, y Tres Mares I y II. Por tanto, el proyecto, que se desarrollará en 3 fases, afectará pistas de todos los niveles (verdes, azules y rojas).
Para garantizar el suministro continuo de agua se estima necesaria una acumulación de 82.000 metros cúbicos de recurso hídrico, motivo por el cual se ejecutarán dos embalses de regulación y almacenamiento en las zonas conocidas como ‘Las Hoyas’ y ‘Calgosa’, y un azud de captación, o pequeña presa, para su captación.
Finalmente, Ignacio Diego ha asegurado que el impulso que su Gobierno está dando esta legislatura en materia de promoción de instalaciones turísticas «no tiene parangón» en Cantabria. En este sentido, además del anuncio realizado hoy, ha recordado la reciente licitación también del telecabina de Cabárceno, la próxima salida a concurso del teleférico de Vega de Pas o las obras que ya se están acometiendo para ampliar el campo de golf del Abra del Pas a 18 hoyos.
El proceso
La licitación, que hoy mismo aparece publicada en el Boletín Oficial de la Unión Europea (DOUE) y próximamente lo hará en el Boletín Oficial de Cantabria (BOC), cuenta con el informe técnico-financiero que avala la necesidad y la oportunidad de ejecutar el proyecto, así como el correspondiente informe jurídico que garantiza su legalidad.
El objeto del contrato incluirá la redacción del proyecto y los estudios técnicos necesarios en los dos meses siguientes a la publicación en el BOC, el suministro e instalación del sistema de innivación completo en un periodo de 10 meses, y un servicio técnico integral durante los 2 primeros años. Una vez concluya este periodo, será Cantur quien decida si realizar el mantenimiento con personal propio o contratar para ello a una asistencia técnica.
En relación a esto, el presidente Diego ha explicado que la no redacción del proyecto por parte de Cantur responde a la voluntad del Ejecutivo cántabro de favorecer la mayor concurrencia competitiva posible y, por tanto, de beneficiar al interés público.
La empresa pública abonará la cantidad en que finalmente se adjudique el servicio en un mínimo de 5 anualidades y un máximo de 12, en función de la oferta realizada por el licitador, a partir de la fecha de recepción.